En Meki y alrededores la cosecha se empieza a
recoger en esta época. Tras la época de lluvias la mayoría de la gente planta
los terrenos de alrededor con distintos cereales: teffe, trigo, maíz… Y unos
meses después recogen el resultado. En ese momento nos encontramos ahora.
Es un momento que se celebra y, como siempre
que se festeja algo aquí, se realiza la ceremonia del café. Un café tostado y
preparado en cazuelas, con incienso y mirra para aromatizar el momento. Es
especial.
Es una época tras la que la gente del campo
consigue alimentarse de una forma más continuada, más regular. Espero que lleve
consigo una disminución de los niños malnutridos que se ven en la clínica!
Para mí esta semana ha sido muy especial
también. El viernes llegó Marta, la pediatra que me da el relevo en la clínica.
Durante un par de días he estado de apoyo en la clínica, hasta que se ha hecho
con el funcionamiento… y yo me he dedicado a otra tarea importante pero poco
grata: administración y organización del trabajo que he realizado aquí. Es mi
cosecha particular.
En este tipo de proyectos la recogida y
análisis de lo realizado es tan importante como la propia atención a pacientes.
Así uno se puede dar cuenta de la manera en la que se ha trabajado y de las
cosas que son mejorables.
Se va acercando el fin de mi etapa por aquí.
2 comentarios:
Imagino esa sensación reconfortarble, de cierta felicidad, pero sobretodo de tanta utilidad. Disfruta porque son verdaderas vivencias, las auténticas.
Seguro que te queda buen sabor de boca de un trabajo bien hecho y experiencias vividas, pero mejor les quedará a ellos por haber podido contar contigo.
Muchas gracias Antonio
Publicar un comentario